Boletín derechos indígenas

Resistencia a reconocer los derechos locales sobre la tierra amenaza las perspectivas globales de detener la deforestación

DEFORESTACION, TALA DE ARBOLES

A seis semanas desde que el Acuerdo de París colocara los bosques tropicales en el centro de la lucha global contra el cambio climático, expertos en un encuentro en Londres señalan que “la resistencia gubernamental a reconocer los derechos locales sobre la tierra amenaza las perspectivas globales de detener la deforestación y alimenta un conflicto lo suficientemente costoso como para ahuyentar a los inversores”.

En palabras de Andy White, coordinador de la Iniciativa de Derechos y Recursos (RRI, por sus siglas en inglés), entidad organizadora de la actividad:

“La falta de seguridad sobre los derechos también amenaza los esfuerzos por mitigar el cambio climático. A pesar del consenso internacional de que los bosques tropicales son fundamentales para mantener el calentamiento por debajo de los dos grados y de la creciente conciencia sobre el rol vital que las comunidades forestales tienen en la protección de esos bosques, el ritmo del reconocimiento de sus derechos continúa rezagado. Algunos grandes países ahora están posicionados para reconocer derechos a escala masiva (incluyendo Indonesia y la India), pero la fuerte resistencia de agencias gubernamentales, compañías privadas y determinadas organizaciones conservacionistas bloquean el progreso”.

Y no sólo eso. Según otro de los expertos participantes -Lou Munden, fundador de TMP Systems- esta falta de reconocimiento también inflige a los inversores un daño financiero significativo. Descubrimos que esto es así en más de la mitad de los 360 casos que estudiamos, y casi todos los conflictos que revisamos estaban vinculados con la tenencia débil de la tierra”.

“Estamos en un momento en el que los inversores privados tienen que decidir cómo invertir su dinero para cumplir mejor con sus compromisos para detener la deforestación y respetar los derechos. Los gobiernos que quieren atraer a esos inversores tienen que asegurar que los derechos de las comunidades locales se definan legalmente y se respeten, a fin de garantizar que las compañías no incurran en riesgos relacionados con la tenencia que puedan representar una carga financiera y un daño a la reputación -añadió White-. Esto también beneficia a los gobiernos. Los esfuerzos por mitigar el riesgo y cumplir con los compromisos de deforestación solo pueden tener éxito si se toman en cuenta los derechos consuetudinarios sobre la tierra”.

Se puede acceder a la nota completa del panel en este enlace.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos necesarios están marcados *